Julián Montoya se formó en el Club Newman, en Buenos Aires. Jugó en Pumitas, Pampas XV, y ya tiene 41 test matches en Los Pumas, además de haber disputado 21 partidos con la de la franquicia argentina. Nada mal para el joven de la categoría 1993.

Será la tercera temporada para el hooker, que llega con mucha ilusión: «Llegue con muchas expectativas a esta nueva pretemporada. Arrancar un nuevo año con un nuevo staff te da mucha ilusión y la incertidumbre te prepara para dejar todo».

Durante estas primeras semanas de preparación, el grupo contó con la presencia de ocho jugadores invitados, además de la incorporación de Sebastián Cencelliere y Santiago Álvarez Fourcade, provenientes de Hindú y del Club Atlético San Isidro, respectivamente. «A la mayoría de los chicos nuevos ya los conocía por los clubes o por los Centrros de Alto Rendimiento. La relación es muy buena y la adaptación fue muy fácil y rápida. Está buenísimo compartir el rugby con amigos«.

«Mi objetivo es disfrutar todo el proceso». Así respondió Julián cuando se le preguntó sobre qué cosas se había planteado para desarrollar a lo largo del 2018. «Es una año nuevo y me encantaría jugar más minutos, pero siempre tratando de aportar al equipo desde donde me toque.»

Laburo y locura son dos palabras que vienen resonando en las mentes de los jugadores y que sin duda son el denominador común de esta pretemporada, y dos conceptos que marcarán el porvenir del equipo. Laburo y locura. «A modo grupal no se habló nada en cuanto a resultados, pero sí el foco está puesto en el laburo y en la locura. Además, se busca dar un salto en la profesionalidad».

Profesionalidad que tiene que ver con el modo de hacer las cosas. La seriedad, la responsabilidad, la honestidad hacia uno mismo, y entregarse máximo en cada una de las cosas que se llevan a cabo.

Debutó en 2014 con la camiseta celeste y blanca, y jugó su primer partido por el Rugby Championship al año siguiente. «Toda mi vida soñé con dedicarme al rugby; desde que era chico. Ver a Los Pumas, la Liga Inglesa, la Francesa, y el Super Rugby, me incentivó mucho. Ya cuando formé parte del PlADAR, de las Concentraciones Nacionales, del Mundial Juvenil, me di cuenta que podía ser. Se fue dando, pero fue algo que siempre soñé. En eso fue muy importante el apoyo inmenso de mi familia, porque nunca faltaron a un partido mio desde que estoy en juveniles y siempre tuve un apoyo incondicional de parte de ellos.»

Julián Montoya jugará su tercera temporada para el equipo que en 2018 conduce Mario Ledesma, y tiene como asistentes a Nicolás Fernández Miranda y Martín Gaitán.